En 1988 se funda en Nicaragua la primera Escuela Nacional de Ballet, para el estudio profesional del ballet clásico. En el 2009, gracias a la voluntad del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional y la implementación de su Política Cultural a través del Instituto Nicaragüense de Cultura (INC), este proyecto reabre el Programa de Formación de Profesores y Bailarines de Danza Clásica dando así continuidad al trabajo iniciado en 1988. Su objetivo es formar bailarines y docentes integrales de ballet con el fin de que intervengan y transformen el campo de la danza y la producción cultural mediante la creación y desarrollo de sus potencialidades humanas. Asimismo, busca despertar el espíritu reflexivo, crítico y constructor en los miembros de la comunidad, hacia la creación del tejido artístico que fortalezca la cultura regional con la finalidad de impactar en la educación nicaragüense.